En 2024, Trujillo se ubicó entre las 10 ciudades más congestionadas del mundo (TomTom). Actualmente, recorrer 10 km toma en promedio 34 minutos, lo que antes era un problema en horas punta, ahora es un caos diario. Como resultado, cada trujillano pierde 102 horas al año atrapado en el tráfico.

Uno de los principales factores detrás de esta crisis es el aumento de vehículos en circulación. En noviembre de 2024, el INEI registró 971 mil autos en la región, 81 mil más que el año anterior. Sin embargo, el problema no es solo el número de autos, sino la falta de un sistema de transporte eficiente que pueda aliviar el tráfico.

El año pasado, Trujillo perdió más de S/ 540 millones debido a la congestión vehicular, que afecta la competitividad y productividad de la región (Transis, 2024). Además, el tráfico genera estrés, lo que impacta negativamente en la salud física y mental y aumenta las ausencias laborales. A esto se suman las emisiones contaminantes, que deterioran la salud pública y elevan los costos médicos.

Para enfrentar este desafío, el Banco Mundial (2024) propone invertir en transporte masivo eficiente, como redes de metro y autobuses de tránsito rápido. Por su parte, el BID (2021) propone la creación de un Sistema Integrado de Transporte, que conecte autos, transporte público y movilidad activa (bicicletas y caminata). Además, resalta la importancia de desarrollar infraestructura adecuada, como ciclovías y espacios peatonales seguros, para fomentar alternativas de movilidad más sostenibles.