Al cierre de 2024, 4 de cada 10 colegios en Lambayeque deben ser demolidos por graves problemas de infraestructura: techos a punto de colapsar, aulas sin agua ni luz, y estructuras altamente vulnerables a desastres naturales. Esta crítica situación afecta a más de 36 mil estudiantes, poniendo en riesgo su seguridad y el desarrollo del año escolar 2025 (Minedu).

Para mejorar la infraestructura educativa en la región, se requiere una inversión estimada de S/ 4,140 millones en reconstrucción, mantenimiento y mejoras de colegios. Sin embargo, la falta de ejecución presupuestal sigue siendo un obstáculo: en 2024, el Gobierno Regional no utilizó S/17 millones destinados a mejorar colegios, construir nuevos y garantizar servicios básicos (MEF, 2024). Cada sol no invertido es una oportunidad perdida para brindar mejores condiciones a los estudiantes.

La falta de colegios en buen estado no solo dificulta el aprendizaje  , sino que también incrementa el ausentismo. Sin agua potable, con baños deteriorados, y aulas inadecuadas es difícil concentrarse, y asistir con regularidad (Banco Mundial, 2019). La evidencia lo confirma: mejorar el saneamiento escolar puede reducir el abandono en primaria hasta en 12% (Adukia, 2017).

Para enfrentar los desafíos en infraestructura educativa, se requiere mejorar la gestión de la inversión pública. Esto implica capacitar a los gobiernos regionales y locales en la formulación de proyectos viables, brindarles apoyo técnico durante su ejecución y reforzar los mecanismos de seguimiento (IDEHPUCP, 2023). Además, es urgente apostar por soluciones sostenibles que aseguren servicios básicos constantes y entornos seguros, como materiales duraderos, captación de agua y energía solar (CIES, 2023).

La educación no solo depende de libros y maestros, sino también de espacios seguros y dignos que protejan a los estudiantes y garanticen un aprendizaje adecuado.

¿Qué otras acciones crees necesarias para mejorar las escuelas en Lambayeque?